Resistencias a la tecnología en la construcción
A medida que las nuevas empresas de tecnología para la construcción tienen como objetivo revolucionar esta industria, muchos se dan cuenta de los problemas existentes para modificar los procesos constructivos. El modelo tecnológico actual, disruptivo y expansivo, basado en ganar rápidamente una masa crítica gracias a los beneficios que ofrece, ha encontrado resistencias hacia la tecnología en la construcción. Debido entre otras causas a la fragmentación empresarial en la realización de procesos, regulaciones onerosas y complejidades operativas.
Incapaz de abrirse paso y vencer a las resistencias a la tecnología en la construcción, numerosas empresas emergentes han desaparecido sin poder llevar a cabo la transformación digital del sector. Por todo ello, ¿es la tecnología la respuesta?
En la segunda industria menos digitalizada del mundo, la respuesta es un rotundo sí.
La tecnología es fundamental para que las constructoras estén preparadas para el futuro.
Aversión a la tecnología
La adopción de clientes es un desafío importante para la empresas tecnológicas en la construcción. En las constructoras medianas y pequeñas predominan los sistemas heredados. Incluso si ese sistema es un presentimiento o un lápiz detrás de la oreja.
Desde el punto de vista de las constructoras, el sector tecnológico no conoce íntimamente la construcción, por lo que su capacidad para resolver sus problemas es limitada. El coste de cambio y los posibles contratiempos de integración son demasiado en una industria repleta de riesgos con márgenes muy reducidos.
Por el contrario, la industria de la tecnología prospera al deconstruir un problema y reconstruir digitalmente una mejor manera de resolverlo. Normalmente las startups son personas no expertas que desafían el status quo de una industria que sus miembros dan por sentado.
Sin embargo, debido al alto grado de complejidad de la construcción, no se puede forzar la adaptación. Por lo tanto, las empresas tecnológicas deben traer gente con barro en las botas.
Las nuevas empresas de Contech que adoptan un enfoque de asociación, haciendo parte del desarrollo a las constructoras, aumentan las probabilidades de éxito. Además, las constructoras confían más en equipos con experiencia en la construcción especializada. Es decir empresas centradas en desarrollar productos con un caso de uso muy específico para un problema importante.
Cada solución tiene un grado de impacto de acuerdo a la especialización y la tipología de la constructora. Dada la importancia de estas características más particulares, la adopción de tecnología tiene una prioridad variable en cada cliente potencial, con unas resistencias determinadas a la tecnología.
A menos que la solución se centre en una prioridad universal: el flujo de caja. Creando más y protegiéndolo. Este desafío es compartido por todo el sector, ya que la liquidez determina la viabilidad para operar.
Flujo de efectivo
La liquidez es el elemento vital de cualquier negocio, especialmente para constructoras, en un vaivén interminable de gestión de ciclos negativos de capital de trabajo. Las constructoras están sujetas a la compra de suministros y materiales por adelantado, mientras que se tarda en promedio 51 días en recibir el pago. La lentitud en los pagos ocasionó en Estados Unidos $136,000 millones en costes adicionales y un mayor paro laboral.
Esta situación dificulta el acceso de tecnología al sector de la construcción. Dado que la mayoría de empresas tecnológicas cobra por adelantado o con suscripciones por sus servicios. Esto choca frontalmente con las formas de pago de las constructoras: pagarés o procesos más complejos con validaciones adicionales que retrasan los pagos.
El cuello de botella principal de ambos problemas es la cadena de aprobación. Desde la solicitud de pedidos hasta la clasificación de cientos de páginas de documentos en papel y electrónicos. Demostrar un hito exige una gran carga administrativa. Tras ello, se demora más aún el pago real hasta la verificación por parte del propietario del cumplimiento de los hitos.
Las nuevas empresas de gestión de pagos son una iteración fundamental para abordar estas ineficiencias. Ofreciendo alternativas a la financiación y a las aplicaciones de pago engorrosas.
Además, contratos inteligentes basados en blockchain permitirán una verificación del trabajo más rápida. Gracias a las nuevas herramientas, se obtiene un proceso de aprobación acelerado enlazando los pagos con hitos integrados en el contrato inteligente. Un flujo de datos de proyectos en tiempo real activa las aprobaciones en cada etapa, lo que conduce a una remesa de pago más rápida y más justa.
HIGIENE CIBERNÉTICA
La inclusión de tecnología ocasiona la aparición de nuevas amenazas, en este caso cibernéticas. A medida que aumenta la superficie de ataque de una empresa (más herramientas digitales y tecnología), también lo hace su vulnerabilidad. La amenaza cibernética es una de las resistencias fundamentales para la implementación de más tecnología. Sin embargo, la industria de la construcción analógica está sujeta a amenazas igualmente graves. La construcción ha sido una de las principales industrias objetivo de los ataques de ransomware desde 2020.
Los atacantes cibernéticos ven a las empresas de construcción como una fruta madura con defensas cibernéticas menos maduras. Como objetivos más fáciles, requiere menos esfuerzo para causar la interrupción del negocio, forzar retrasos en los proyectos e infligir daños financieros. Le sigue el daño a la reputación, al igual que la exposición de clientes y subcontratistas a daños potenciales cuando la víctima posee datos confidenciales.
Los ciberdelincuentes suelen apuntar mediante phishing y suplantación de identidad a puntos de entrada con datos vulnerables o correos electrónicos de personas con una función de pago.
Las cadenas de suministro se están preparando para el aumento de las amenazas cibernéticas. El ecosistema de la cadena de suministro de la construcción carece de controles y medidas estandarizados que protejan la confidencialidad y la integridad. A medida que el ecosistema avanza hacia sistemas digitalizados y automatizados con tecnologías basadas en la nube, es fundamental resolver estas vulnerabilidades.
La higiene cibernética de las empresas de construcción debe ser la prioridad número uno. Para proteger el flujo de efectivo y la integridad de toda la cadena de valor del sector.
A prueba de futuro
La construcción se encuentra en las primeras etapas de la digitalización. Revisando los procesos manuales y localizando donde se pueden implementar eficiencias en los flujos de trabajo y la recopilación de datos. Esta primera capa de adopción de tecnología en todos los departamentos es esencial.
Principalmente por el actual envejecimiento del personal de construcción. Además, la entrada de gente joven pierde cada vez más fuerza, conforme las próximas generaciones optan por abandonar la industria en favor de otras, a menudo con tecnología más avanzada. Las constructoras pueden crear más opciones de futuro adoptando medidas tecnológicas, que hagan de la construcción un sector más atractivo.
El cambio de imagen de un equipo de construcción tradicional a una empresa tecnológicamente avanzada y habilitada por la tecnología permite que la próxima generación tenga una participación directa en su transformación. Alinear el futuro de la organización con la tecnología permitirá ofertas carreras tecnológicas que hasta ahora solo estaban en otros sectores.
En conclusión, el sector de la construcción debe vencer esas resistencias iniciales hacia la tecnología. Para así, preparar su negocio para el futuro y asegurar su longevidad. El tiempo y el dinero invertidos ahora para adaptarse a los avances tecnológicos parecerán intrascendentes con el tiempo. Al ritmo actual de cambio, es probable que los beneficios se obtengan antes de lo esperado. El desembolso de hoy no es un coste, es una inversión.
