Simulador del hormigón digital – Caso de estudio II
Hoy continuamos el caso de estudio presentado en la última publicación sobre el simulador del hormigón digital. Para ello, se realiza un análisis comparativo entre la metodología con hormigón digital y ciclos fijos de 10 días en tres provincias frías de España.
Como ya se explicó, el análisis consiste en generar mediante el simulador del hormigón digital la planificación de un proyecto. Esta, se realiza de acuerdo con dos metodologías (hormigón digital y ciclos fijos de 10 días) y una serie de variables. Estas variables son la ubicación (se estudian 3 provincias distintas), las condiciones meteorológicas y el tipo de hormigón utilizado.
Las tres provincias frías escogidas se encuentran al norte de España, con el fin de encontrar las condiciones más desfavorables. Con el objetivo de tener más diversidad en los datos se seleccionan dos provincias costeras, Lugo y Vizcaya, y una provincia de interior, Soria.
En la siguiente tabla se muestran los resultados obtenidas tras llevar a cabo las simulaciones.
Interpretación de resultados
La implementación de sensores de madurez con un hormigón de curado rápido supone un ahorro en el tiempo de ejecución de la estructura en todos los casos. Por lo contrario en la utilización de hormigones de curado lento, los factores ambientales cobran mayor importancia a la hora de disminuir los tiempos de ejecución de las estructuras.
Centrándonos en la casuística del hormigón lento. En el caso de Vizcaya, con una temperatura media alrededor de 10ºC se mejoran ligeramente los tiempos respecto a los ciclos fijos de 10 días. No obstante, en los casos restantes, se incrementan, a cambio de mejorar la prevención de riesgos, reduciendo accidentes, colapsos y retrabajos durante el proyecto.
Estos datos confirman que la metodología de ciclos fijos de 10 días será demasiado conservadora en algunos casos y en otros no lo será suficiente. Esto se debe, a que otros factores, como la mezcla de hormigón o la temperatura ambiental, juegan un papel destacado en el curado del hormigón.
Un aspecto muy importante a tener en cuenta es que las normativas especifican como método de control el ensayo a compresión del hormigón con probetas curadas en condiciones de laboratorio. Este control en los casos de estudio arriba mencionados no es representativo. Dado que las condiciones presentes (temperaturas frías) se alejan de esas condiciones de laboratorio. Esto supondrá, que la rotura en laboratorio indicará unas condiciones incorrectas respecto al desarrollo real de la resistencia del hormigón vertido en obra.
Junto a los datos de la tabla 1, el simulador del hormigón digital también genera una planificación detallada de los hormigonados de la estructura para cada metodología. En ese detalle podemos observar que incluso en los casos de estudio donde la implementación de sensores de madurez supone un ahorro en el tiempo total de ejecución de la estructura existen fases donde esta metodología se retrasará respecto a los ciclos fijos de 10 días.
Como se puede observar en la imagen 1, durante la ejecución de las fases 20 -23 con sensores de madurez se evidencian ciclos superiores a 10 días. Esto se debe principalmente a las bajas temperaturas. Estas demoras en la estructura evitan posibles colapsos, accidentes y deformaciones permanentes o temporales en la misma.
En la próxima publicación nos centraremos en el análisis comparativo de tres provincias cálidas y en presentar la interpretación general de todo el estudio.